A la hora de proponerse una meta a la que se quiere llegar, o dicho de otra forma, un objetivo, hay que prestar atención a unas determinadas pautas para que ese objetivo sea realizable. En caso contrario, es decir, que a la meta que deseamos llegar es inalcanzable, puede tener consecuencias en el sistema emocional de la persona.
Para empezar hay que tener dos cosas muy claras, primero saber "dónde estamos", siendo honestos con nosotros mismos, y lo segundo es "a dónde queremos llegar". Ese "a dónde queremos llegar" es lo que llamamos objetivo o meta. Y esta entrada está escrita para aprender a marcar o formar adecuadamente ese "a dónde queremos llegar".
A continuación enumeraré siete cualidades que debe tener el objetivo:
Afirmativo: Con esto quiero decir que debe estar formulado de forma positiva evitando siempre las frases negativas. Voy a poner un ejemplo, no es lo mismo decir quiero adelgazar que no quiero estar gordo. Algunos dicen que el universo/subconsciente no entiende la negación, y esto nos llevaría a que la frase en negativo puesta en el ejemplo quedaría tal que así no quiero estar gordo. De forma que para nada nos acerca al objetivo deseado. También hay que tener en cuenta que cuanto más valor se le da al problema (en el ejemplo, sobrepeso), más grande serán las medidas a tomar y en muchos casos pueden parecernos inalcanzables. Por lo que es recomendable siempre buscar la alternativa. Otro ejemplo sería el tabaco, no es lo mismo decir no quiero fumar que decir quiero estar libre de humo.
Es más fácil acercarte a lo que quieres que alejarte de lo que no quieres.
Autogestionado: Este es también un punto importante. Significa que depende de uno mismo. Un ejemplo que me viene a la cabeza es el típico comentario de si me toca la lotería, haría.... Esta afirmación depende exclusivamente de la suerte que uno tenga en los juegos de azar. Un ejemplo de objetivo autogestionado sería cada vez que suba a mi casa subiré por las escaleras. Este objetivo sólo depende de uno mismo, salvo que en el pasillo a la escalera haya un T-Rex que te impide el paso.
Concreto/específico y conciso: Siempre hay que tener un objetivo concreto para poder realizarlo. Otros sinónimos para este punto podrían ser preciso y determinado. No es lo mismo decir quiero adelgazar que En 1 mes voy a adelgazar 500 gramos. Y esto nos lleva al punto siguiente.
Realista: No se puede pretender adelgazar 5 kilos en una semana. Esto equivale aproximadamente a un kilo por día, y eso no es sano. El objetivo debe ser realista. Me gusta mucho el ejemplo del Maratón. Si nunca has corrido, no te levantas un día y empiezas a correr 42 mil 195 metros sin parar. Por muy fuerte que sea tu mente, seguro que en el proceso sufres algo. Se dice que para correr una maratón por lo menos debes entrenar, y es un entrenamiento muy específico, durante 8 semanas, y esto es para personas que ya corren. Así pues,
si el objetivo es muy grande, este debe ser fraccionado en pequeños procesos.
Con base sensorial: Esta es una cualidad un tanto extraña pero con esto quiero decir que todo objetivo debe de ser verificable, y por ahora son nuestros sentidos (olfato, vista, oido, gusto y tacto) los que pueden verificar algo. En el ejemplo de quiero adelgazar hay muchos factores que nos pueden indicar que estamos avanzando en nuestro objetivo, la vista puede hacernos ver que estamos más delgados o que podemos ver en la báscula que hemos reducido kilos.
Motivante: Sin duda una de las cualidades más importantes. La motivación para lograr el objetivo. Podemos crearnos un objetivo absolutamente realista, afirmativo y muy concreto pero si no tenemos la motivación para realizarlo ese objetivo nunca será alcanzado. La motivación es muy importante que venga desde dentro. Ese objetivo quiero lograrlo porque yo quiero. Si el objetivo proviene del exterior siempre tendremos la excusa de decir que no es lo que nosotros queríamos. Y hay muchas formas de buscar motivación. Se podría escribir toda una entrada sobre esto pero voy a recomendar leer como motivarse.
Ecológico: Y por último, y no por ello menos importante. ¿A qué se refiere? Que respete el sistema en el que el sujeto se encuentra. Y me refiero a la estructura del conjunto de unidades relacionadas entre sí. Para empezar, dentro del ser. Un objetivo para la mente que no respete el cuerpo, y viceversa, es un objetivo abocado al fracaso.
Y para seguir, dentro de su entorno. Es importante valorar el objetivo porque este puede alterar el entorno de cada uno. Y a lo mejor es realmente lo que se está buscando, pero si no lo es, puede que nos llevemos alguna sorpresa.
Ahora es momento de valorar tu objetivo, para ello, las preguntas a plantearse son:
¿Me motiva, respeta mi ser y mi entorno, depende exclusivamente de mi? ¿Es un objetivo positivo? |
1 comentario:
Una preguta amigo,
el tratamiento de la osteopatia si funciona?, gracias y te agradeceria tu respuesta. Un saludo
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